Cuando los hacendados británicos se aventuraron por primera vez en el valle de Assam en las décadas de 1850 y 1860 con la idea de establecer plantaciones de té, enfrentaron muchas dificultades; especialmente con la vida silvestre. Tuvieron que lidiar con elefantes merodeadores, cobras reales y tropas de monos ¡Los monos eran más una molestia que una amenaza, ya que rápidamente robarían cualquier cosa que quedara desatendida! Quizás el animal más temido era el tigre de Bengala, un animal que podía matar con un golpe de sus poderosas patas y llevarse a los jóvenes.
Los relatos históricos hablan de los plantadores que hirvieron agua y agregaron frutas y especias cultivadas localmente junto con el té para evitar el hambre y los episodios de sed. La fruta les daría la vitamina C que su cuerpo necesitaba; la canela tuvo un efecto curativo en su sistema digestivo… y el té ¡bueno! ¡Qué ciudadano de Inglaterra podría sobrevivir sin té!
Encontraras en tu taza dulces el aroma de la canela, maracuyá y mango dan como resultado un té de frutas y especias deliciosamente suave.
Ingrediente de grado Luxuy proveniente de India, Sri Lanka, Tailandia, Egipto, Polonia. Te recomendamos no exceder el tiempo sugerido de infusión porque tu té puede volverse amargo. Para su preparación utiliza siempre agua potable o pobremente mineralizada.